jueves, 28 de febrero de 2008

Cerco al Congreso

14:45
El Congreso se encuentra cercado por campesinos, ponchos rojos y mineros. Hace un momento nos pidieron que tomemos nuestras precauciones. Yo me arrepiento de haber traído mi laptop. Todos estamos nerviosos (acaba de gritar una mujer ante la explosión de una dinamita). El ambiente es tenso, los teléfonos suenan (junto con otro par de dinamitazos). Hemos cerrado y engranpado las cortinas, para dar un poco más de protección ante la posibilidad de un piedrazo certero. Los policías rondan por todas partes, las salidas están repletas de ellos. Yo ya hice una copia de mi trabajo en mi Flash drive, ahora mi dilema es, ante una eventual evacuación, si voy a llevar mi laptop conmigo y esconder mi flash drive en alguna parte de la oficina, o voy a dejar mi flash y llevar mi laptop (me muero sin mi laptop).
Varios senadores y diputados se encuentran en el edificio de la vicepresidencia a una cuadra de aquí. Mas tarde hay sesión de congreso y no se sabe como van a poder llegar hasta aquí. La gente llama a la prensa, que puede dar mayores garantías que la misma policía, alguien pregunta si no han visto a los tránsfugas senadores suplentes rondando por ahí. Es importante no permitir que el MAS vuelva a cerrar el congreso (otro dinamitazo me causa un sobresalto).
Una colega me acaba de llamar, me dice que está en las afueras del Congreso y que la policía no está dejando entrar ni salir a nadie.
Escucho la radio mientras escribo, están informando sobre el cerco, hablan del número de personas que se están acoplando al cerco. Reiteran la amenaza de que no se moverán hasta que el congreso apruebe el referéndum dirimidor de la constitución del MAS.
Creo que no voy a viajar a Santa Cruz hoy...

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