domingo, 30 de octubre de 2016

Los enemigos del comercio

Javier Paz García
Pensadores como Marx, Mises, Gramsci, Keynes, Hayek o Friedman entendían que las ideas de los intelectuales tienen una gran influencia en el mundo. “Los hombres prácticos, que se creen exentos de cualquier influencia intelectual, son usualmente esclavos de algún economista difunto” escribía Keynes en las notas finales de su Teoría General.
Sin embargo, tratar de descifrar la relación entre las ideas imperantes en una civilización y los hechos históricos de la misma es algo más difícil que simplemente afirmar que tal relación existe: Antonio Escohotado emprende esa monumental tarea con afortunado éxito en Los Enemigos del Comercio. Reminiscente de A History of Western Philosophy de Bertrand Russell, Escohotado transita desde los tiempos presocráticos y los inicios de las polis griegas hasta la revolución francesa, desmenuzando los movimientos filosóficos y analizando cómo éstos influían y eran influidos por la política, economía y por los acontecimientos históricos.
El libro, como su título lo indica, se centra en la influencia de las ideas contrarias a la propiedad privada, al comercio libre y voluntario, a la generación de riqueza y a la libertad en general. Desde los admiradores de la militarista Esparta por sobre la culta y democrática Atenas hasta los albores del comunismo, Escohotado analiza la evolución de una secta judía cuyo ascenso coincide (no del todo por coincidencia) con la decadencia del imperio romano y sumersión de Europa en un periodo de mil años de oscurantismo y estancamiento. Por supuesto, la Iglesia Católica que históricamente condenó el lucro e incluso la higiene por ser cosas de este mundo pero no dudó en lucrar del tráfico de almas vendiendo indultos y salvaciones de papel, juega un rol primordial en este cuento. Verbigracia, un secretario de Carlos V escribe en 1526 con cierta jocosidad: “El prepucio de Cristo lo he visto yo personalmente en Roma, Burgos y Amberes (al parecer existen un total de catorce ejemplares), y tan solo en Francia hay ya quinientos dientes del niño Jesús. En muchos lugares se conserva la leche de la Virgen y en otros las plumas del Espíritu Santo.”
Un hecho que no escapa a la agudeza de Escohotado es la habilidad de los liberticidad de todas las épocas para elaborar distorsiones semánticas de tal envergadura que justifiquen la tiranía en nombre de la libertad, la discriminación en nombre de la igualdad y el fratricidio en nombre de la fraternidad y para proclamar al verdugo como un salvador, como muy bien lo ilustran los revolucionarios franceses.
Un libro exhaustivamente documentado y sobreabundante de citas históricas, de una agudeza sin par, con ese sentido de lo sarcástico y lo tragicómico muy propio de los españoles, es un placer de principio a fin.
Santa Cruz de la Sierra, 14/10/16

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domingo, 23 de octubre de 2016

Consideraciones sobre el segundo aguinaldo

Javier Paz García
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha declarado que el crecimiento de Bolivia de octubre 2015 a septiembre 2016 ha sido de 4,43%. Las reacciones han sido de alivio y júbilo para quienes pagan salarios, y de tristeza e indignación para otros. Especialmente iracunda ha sido la reacción de la Central Obrera Boliviana, institución de la cual no se puede esperar ni un acto de sensatez.
El vicepresidente evidencia lo absurdo del decreto cuando expresa “que es preferible no tener segundo aguinaldo este año, tenerlo el siguiente trabajando más a no tener trabajo, es mejor no recibir segundo aguinaldo, pero si garantizar que usted tiene su trabajo, que el obrero siga con su trabajo, que forzar las cosas para tener segundo aguinaldo, pasar una buena navidad y llorar en enero". Y es que si las aseveraciones del vicepresidente son válidas ahora, ¿por qué no lo fueron antes? Tales declaraciones reafirman la pobreza intelectual de quien es considerado el mayor intelectual del proceso de cambio.
Decretar un salario adicional a todas las empresas del país sobre la base del crecimiento agregado de una nación es un disparate análogo a premiar a un estudiante que se aplazó en la materia, bajo el argumento de que el promedio de todos los alumnos del curso fue de aprobación. Algunos han sugerido que el doble aguinaldo se pague por rubro económico, lo cual no deja de seguir siendo un disparate pero a menor escala, ya que dentro de cada rubro también hay empresas que prosperan y otras que se contraen y mueren.
Incluso más allá del cálculo economicista de si es factible para el país, para un sector económico o para una empresa en particular pagar el segundo aguinaldo, debemos considerar el hecho legal y ético. La relación laboral es eminentemente una relación contractual voluntaria. Un potencial empleador y un potencial empleado se reúnen y negocian las condiciones laborales; solo de una negociación donde ambas partes están de acuerdo con las condiciones, incluida la remuneración, es que nace una relación laboral. El decreto violenta ese mutuo y voluntario acuerdo entre empleador y empleado y obliga a  una parte a efectuar una remuneración a la que nunca se comprometió. Esto es tan inmoral como hacer lo contrario: si el gobierno decretara que intempestivamente que los empleadores en todo el país deben reducir los salarios en 10% cometería un abuso similar al de decretar un aguinaldo adicional, la única diferencia es quién paga y quién se beneficia.
Santa Cruz de la Sierra, 16/10/10
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viernes, 14 de octubre de 2016

¿Por qué el tránsito no es municipal?

Javier Paz García
En Santa Cruz de la Sierra uno puede encontrar infracciones al código de tránsito casi en cada esquina. Ya no hablemos de vehículos parqueados en doble fila, sino incluso hasta en triple fila, micreros que no respetan semáforo y que se suben a las aceras para adelantar vehículos, autos parqueados en plena avenida, el insultante humo de los micros, etc. y la policía de tránsito brilla por su ausencia. Por ejemplo, en el Ventura Mall los taxis se estacionan sobre el 4to anillo, a pesar de que 5 metros más adelante existe un área para parqueo y los vehículos particulares se estacionan en doble o triple fila al lado de los taxis en vez de ir 5 metros adelante para utilizar dicha área. Por tal motivo ese lugar es un constante e innecesario cuello de botella en la ciudad. Y sin embargo nunca he visto a un policía de tránsito ahí, si pasan, pasan de largo, como si no pasara nada. En la entrada del 4to anillo hacia el Urubó día y noche hay vehículos parqueados vendiendo chucherías, nuevamente donde no se debe parquear y como nuestra inútil policía de tránsito nunca los va a multar, nunca se van a salir.
La policía de tránsito Santa Cruz de la Sierra, además de responder a la Policía Nacional y al Ministerio de Gobierno, no debe tener un solo funcionario nacido en Santa Cruz de la Sierra, entonces no nos debe sorprender que realmente no le interese los problemas de la ciudad. Y por supuesto, con tal estructura el ciudadano no tiene a quien recurrir para denunciar, porque sabe que es inútil, que no van a hacer nada, que no les interesa. Y es que, parafraseando a nuestro plurifolklórico presidente, “no se puede entender” que el rol de tránsito, que es algo netamente municipal, que tiene que ver más con infracciones que con delitos o crímenes, no sea una función del municipio. El ministro de gobierno es responsable del tránsito en 339 municipios, en vez de dejar que 339 alcaldías sean responsables de tal control. Por supuesto el ministro tiene un rotundo aplazo en esta materia, y siempre lo tendrá, bajo la estructura de organización actual. Una estructura que es la herencia de un país centralista, con una visión de colonización más que de autonomía.
 El gobierno central difícilmente cederá cualquier prerrogativa por iniciativa propia, pero eso no significa que es imposible descentralizar y avanzar en la autonomía. Los gobiernos municipales deberían presionar para recuperar algo que siempre debió estar bajo su tutela: el control del tránsito.
Santa Cruz de la Sierra, 09/10/16
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miércoles, 5 de octubre de 2016

Un crimen sin víctimas

Javier Paz García
La reciente publicidad de una empresa de muebles, donde una modelo aparece desnuda ha despertado las reacciones más campechanas en el país. Los activistas han salido a criticar el spot como machista, degradante contra la mujer, llegando a pedir sanciones penales contra la empresa. Incluso el mismo defensor del pueblo ha acusado a la empresa de “cosificación de la mujer” y otros supuestos delitos. Tal vez el hecho de que un tipo mediocre que llegó al cargo por servilismo y para no molestar al partido de gobierno se involucre en la demanda, demuestra lo pueril de la misma.
Al parecer ciertos sectores de la sociedad creen que la empresa cometió un delito y quieren una sanción penal. Pero para que exista un delito debe existir una víctima y entonces viene la pregunta ¿dónde está la víctima? La modelo que participó del spot, es mayor de edad, posee plenas facultades mentales e hizo lo que hizo por una remuneración mutuamente acordada y con pleno conocimiento de los requisitos y las consecuencias de sus actos. Es más, ella está contenta con toda la repercusión mediática. Entonces ¿quién es la víctima? La respuesta que quieren dar algunos es que las víctimas son la mujer, todas las mujeres lo cual equivale a decir que nadie es la víctima.
Durante la mayor parte de la historia de la humanidad, la mujer tuvo un rol de servidumbre y sumisión, algo que en realidad existe hasta nuestros días en mayor o menor medida de acuerdo a cada sociedad. Si el ideal es dar a la mujer igualdad de condiciones, pues ese ideal debe traducirse en libertad para las mujeres: libertad para ser modelos publicitarias y salir desnudas en un spot, libertad para ser ingenieras civiles, pilotos de avión, prostitutas, jugadoras de fútbol, dueñas de empresas, abogadas, políticas, etc. Los grupos que intentan criminalizar los spot sexistas lo hacen bajo el argumento de que quieren proteger y dignificar a la mujer. En realidad lo que hacen es robarle su dignidad al tratarlas como niños incapaces de tomar sus decisiones, quieren robarle su libertad y encasillarlas en un molde único de lo que ellos creen que debería ser el rol y la imagen de la mujer, de manera similar a como se las trataba en la edad media.
No hablo aquí de la calidad estética o moral del spot. Quienes lo consideren ofensivo, tienen todo el derecho a protestar y repudiarlo y expresar su descontento cambiando el canal y no comprando productos a la empresa. Pero entre el repudio civil y la criminalización del hecho existe una gran diferencia que quienes defienden la libertad y la dignidad de las mujeres no debemos cruzar.
Santa Cruz de la Sierra, 27/09/16

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domingo, 2 de octubre de 2016

Dos formas de competencia

Javier Paz García
En la naturaleza los animales compiten entre sí para sobrevivir en una lucha donde a menudo se pone en juego la vida y la muerte. Por ejemplo el león debe matar al ñu para alimentarse y el hipopótamo macho debe pelear con otros para conseguir y conservar su territorio.
Al capitalismo y al libre mercado muchas veces se lo compara con tal estado natural. Frases como “capitalismo salvaje” evocan esta errónea asociación. El capitalismo (entendido como respeto a la propiedad privada y el libre comercio) es básicamente un sistema de cooperación a nivel global. Un celular diseñado en Estados Unidos y ensamblado en China usando partes y materias primas de varios países es distribuido e intercambiado en todo el mundo y todo de forma voluntaria. Yo no conozco a quienes hilaron la ropa que tengo, pero he adquirido esa ropa mediante un sistema de intercambio pacífico, voluntario y mutuamente beneficioso. Dentro de este sistema de cooperación a nivel global existe competencia para producir eficientemente; las empresas que producen el mismo bien a un menor costo o que producen bienes diferenciados y con valor agregado para el consumidor son las que crecen y las empresas que producen bienes caros, desaparecen. Todo esto significa que la competencia capitalista produce el mayor beneficio posible para los consumidores, que por cierto somos todos. Por supuesto en este sistema hay empresas que desaparecen y gente que pierde su trabajo, pero la pérdida de empleos es temporal. En tal sentido, el capitalismo nada tiene de salvaje en el sentido de poner en juego la vida y la muerte y más bien es la máxima expresión de un mundo civilizado, donde se deja de lado el uso de la fuerza y las cosas se consiguen mediante el mutuo acuerdo y el intercambio. La competencia capitalista es la forma en la que logramos que quienes producen zapatos sean los mejores para producir zapatos, quienes producen vehículos sean los mejores para producir vehículos, quienes provean educación sean los mejores para proveer educación, etc.
Existen sistemas humanos más parecidos a la brutalidad de la naturaleza. Los sistemas totalitarios, incluidos los sistemas socialistas son formas de organización donde el más fuerte se impone al más débil mediante la fuerza y donde la competencia por el poder implica generalmente la lucha por la vida y la muerte. Las guerras de conquista y las luchas de poder político tienen más parecido con el salvajismo de la naturaleza que el sistema capitalista.
Santa Cruz de la Sierra, 25/09/16

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