domingo, 2 de diciembre de 2007

Si el MAS quiere diálogo (si lo quisiera)

Javier Paz García
El MAS y Evo Morales han perdido toda credibilidad. ¿Quién les puede creer? ¿Cuándo han honrado algún acuerdo? Nunca. Todo lo que el MAS ha acordado, prometido y firmado ha sido transgredido por el MAS de forma sistemática e intencionada. El MAS no tiene palabra, no tiene códigos éticos, miente con descaro, habla de diálogo y al mismo tiempo insulta y denigra a aquéllos con quienes pretende dialogar.
El MAS gasta alrededor de un millón de dólares mensuales en propagandas (vaya austeridad) llenas de mentiras factuales y ataques a sus opositores, mantiene un discurso de división y llama al enfrentamiento fraticida de forma abierta.
Habla de autonomía y le quita los recursos a las prefecturas, además que aprueba una constitución donde un decreto del presidente está por encima de determinaciones departamentales, ¡vaya autonomía!
Habla de eliminar el racismo y promueve la que probablemente es la constitución más racista del mundo en la actualidad.
Habla de unidad del país y lo divide en 36 naciones basándose en premisas racistas. Habla de inclusión y excluye a todos aquellos que no piensan igual.
Y sin embargo siguen habiendo idiotas que siguen pidiendo diálogo con el Gobierno. Siguen habiendo idiotas que acusan a la oposición de intransigente.
Si el MAS quiere diálogo, si lo quisiera, tendría que dar muestras de buena voluntad de forma unilateral e inmediata. Tendría que volver a la legalidad reconociendo que la aprobación de su constitución es ilegal y anular aquella reunión de constituyentes masistas donde tres bolivianos murieron. Tendría que anular la sesión del Congreso donde hordas de alteños y ponchos rojos amedrentaron a medios de prensa y no permitieron el paso a la oposición.
Hacer esto es justo y necesario. Llamar al diálogo antes de tomar estas medidas sería como que yo le robe la billetera mi vecino y luego que le pida perdón pero que también le diga que no le voy a devolver su billetera, es un despropósito.
Si el MAS tuviera intenciones de dialogar, volvería a la legalidad. Pero no tiene intenciones de hacerlo. Por lo tanto es de idiotas llamar al diálogo o creer en los llamados al diálogo del Gobierno. Pero Bolivia es un país superabundante de idiotas y entre idiotas reina la idiotez.
Santa Cruz de la Sierra, 02/12/07

2 comentarios:

Wiraqocha Yupanqui dijo...

Increíble pero tu post describe exactamente lo que pienso, solo que pienso que somos menos idiotas de lo que crees, hay que tomar en cuenta que las acciones maSSistas están fuera de toda proporción de sensatez y muchos necesitan mas tiempo, o mas sangre, para darse cuenta de lo que esta sucediendo. Encontraras también que hay los que no se quieren dar cuenta y los que no quieren darse cuenta.

Sigue adelante con el post, este medio informático será una herramienta estrategia de difusión de las visiones democráticas en el país en el corto plazo y cuando mas lo necesitamos. Saludos

Javier Paz dijo...

Gracias!!!