lunes, 11 de diciembre de 2006

¿Patriotas a la fuerza?

Javier Paz García
En estos días uno puede agarrar cualquier periódico boliviano y encontrar alguna nota acusando al oriente del país de falta de patriotismo, falta de amor a la patria. Creo que hay cierto grado de verdad en tales acusaciones. Puedo atestiguar como cruceño que en este último año me he sentido cada vez más antagónico con respecto a la patria y, de inicialmente desear una Bolivia unida pero con autonomías regionales, he ido moviéndome al de una Santa Cruz (u oriente) independiente. Supongo que eso me hace merecedor del adjetivo de antipatria, lo acepto cuando hablamos de deshacer la actual y fallida Bolivia y crear una (o dos) mejores. Lo que no acepto de ninguna manera es que me digan que no tengo amor a mi tierra y a mi gente. Amo Bolivia en toda su extensión: he pescado bogas en el Pilcomayo tarijeño; he admirado al imponente Illimani; he comido el fricasé servido por simpáticas cholitas paceñas; Tiahuanacu me maravilló; me he bañado en el Itonamas y he navegado el Titicaca y el Guaporé; he estado en las misiones Jesuíticas innumerables veces; entré a las minas del Cerro Rico y al Museo de la Casa de la Moneda en Potosí; he andado en moto en Trinidad y San Borja y en carretón en Magdalena; he visto los verdes valles del Chapare; he encontrado gente buena donde sea que he ido y les he querido; tengo amigos collas y cambas, indios y blancos, de familias ricas y pobres; me fascina la belleza de la mujer cruceña; he tratado sin éxito de tirar un trompo y hacerlo girar en la palma de mi mano; he cantado fervorosamente el Himno Nacional todos los lunes de mi vida colegial (himno cuyo coro dice “morir antes que esclavos vivir”); me encantan Dixie, Coda 3 y los Karmas (Jilguero Flores es una de mis canciones favoritas); he hecho el servicio pre-militar; he leído a Tamayo y a Coimbra Sanz y puedo recitar el poema de la fiesta de Porongo (donde he comido mandarinas pero nunca recibí mis 4 peladas de yapa); he leído algunos libros de historia nacional y admiro a Don Pedro Domingo Murillo y a la generación de 1809; he visto la pobreza extrema de la gente y me conmueve su sufrimiento; me he entristecido con Huanuni; he vibrado desde lejos con el clamor de la autonomía; y alguna vez pensé que Evo Morales podría hacer cosas buenas por este país.
No señores, a mi no me pueden achacar de no amar mi tierra y mi gente. Lo que sí me pueden increpar es que no tengo el mínimo afecto hacia un sistema centralista que nos asfixia y hacia un Gobierno que nos maltrata, que maliciosamente muestra a los del oriente como culpables históricos y actuales de los todos males de Bolivia, que rechaza nuestra cultura, nuestros usos y costumbres e intenta colonizarnos y subyugarnos. El patriotismo es como el amor a una madre, existe porque la madre nos dio la vida, nos cuido y nos amó. Si existen ahora bolivianos que no sienten ese fervor patriótico es porque han vivido en un Estado que se portó y se porta como una madrastra abusiva, no como una madre. El patriotismo no se impone ni se fuerza, si gana con méritos, con amor. Santa Cruz ha pertenecido a esta fallida República de Bolivia desde su fundación, y siempre le ha puesto el hombro a la nación. La nación ha tenido 181 años para hacerse merecedora de ese patriotismo y no lo ha hecho. ¿De quién es la culpa entonces de que no haya ese patriotismo? De la nación misma y del actual Gobierno. No nos culpen a nosotros de no tener patriotismo.
Fayetteville, 10/12/06.
El Deber, 08/01/07.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

como he dicho, estas en tu derecho. tu, y todos los cruceños. pero tienen la obligacion de ser honestos con el resto del pais. si quieren independencia, diganlo claramente.

y por favor, dejen de joder con cabildos y juegos mediaticos. nuestro gobierno, por imperfecto q sea, se rige por la representacion electoral. Evo es presidente porque gano una eleccion. quieren independencia? recauden firmas. ya con las firmas, pidan una eleccion. TODO lo demas son huevadas, y nos estan jodiendo el pais.

Javier Paz dijo...

Yo hablo por mí, y a diferencia de Evo, no me las doy de ser “la voz del pueblo”. Santa Cruz ya reunió 500,000 firmas, por si no lo sabés, ya voto por un referéndum por la autonomía, donde gano el Sí por más del 70%. Aun así no nos dan autonomías y es por eso que ahora y solo ahora yo deseo la indenpendencia.
Te repito, ya existen las 500,000 firmas, ya hubo una votación, así que no me vengás con sandeces de que empieza a recolectar firmas. Las autonomías están ya ganadas en las urnas por el pueblo. Si este Gobierno no nos la da, estamos en todo nuestro derecho, después de haber agotado todos los recursos legales, de ir a la independencia.

Yo Javier Paz García, con nombre y apellidos, sin representar a nadie sino a mí mismo, sin dejar mensajes sin nombre, sin ponerme bajo el refugio de un anónimo cobarde te digo de nuevo que YO quiero independencia. De juegos mediáticos no hablés que el MAS es una máquina Nazi de propaganda y mentiras. Yo aquí te digo lo que pienso, con mi nombre y sin miedo.

Andrés Pucci dijo...

Muchas felicidades Javier Paz, es bueno decir quien es uno, sin escudarse en un "anónimo" o un pseudónimo.

undiary dijo...

al menos este anónimo nos da la opción de tomar decisiones y hacer lo que veamos conveniente. muchos deberían aprender de él, comenzando por el evo y su camarilla.

saludos javier!

Anónimo dijo...

El referendum fue por las autonomias, pero para que se discutan en la Asamblea Constituyente. esto no es un juego de kinder para decir, ah no me gusta asi, me voy nomas. Independencia? Esta bien, pero recauden firmas que apoyen explicitamente este pedido, y diganle de cara al pueblo que quieren independencia.

En cuanto a los nombres y apellidos, te felicito por tener voz y hablar por ti mismo. Yo lo veo diferente: mi voz la expreso con nombre y apellido en las elecciones (hasta que tengamos un sistema diferente) donde apoyo al candidato o movimiento que me apetece.

Pero al discutir ideas, no considero necesario firmar, las ideas se discuten solas. Si le parece cobarde a alguien, esta bien, me tiene sin cuidado.