jueves, 7 de mayo de 2009

Eligiendo sinvergüenzas

Javier Paz García
Luego de los ataques del 11 de septiembre del 2001, la administración de George Bush lanzó una campaña en todos los niveles para justificar la invasión a Irak. Debo confesar que la presentación del Secretario de Estado Colin Powell ante la ONU donde “demostraba” la existencia de silos de misiles y otras actividades militares me convenció que EEUU tenía el derecho de sacar a Saddam Hussein del poder. Grande fue mi indignación cuando no aparecieron las armas de destrucción masiva que la administración Bush había asegurado que existían. Y mi indignación fue aun mayor cuando el gobierno de Estados Unidos, en una muestra de cinismo, cambió su discurso asegurando que había invadido Irak para proteger al pueblo iraquí del tirano Hussein. Sin embargo a pesar de la evidente mentira y manipulación con la que la administración Bush manejó un tema tan serio como es iniciar una guerra, el 2004 el pueblo de Estados Unidos lo reeligió. Hoy nos enteramos que también utilizó métodos de la inquisición para interrogar a sospechosos de terrorismos.
Daniel Noriega fue un asaltante de bancos, denunciado por su hijastra Zoila América de haberla violado sexualmente por varios años. Hoy es el presidente democráticamente electo de Nicaragua.
Hugo Chávez en nombre de la descentralización ha centralizado funciones de las regiones y municipios, ha financiado campañas políticas en toda América con dinero de los venezolanos, en nombre del socialismo y del amor al prójimo persigue hasta tener en la cárcel a sus opositores y que ha llevado a Venezuela a un caos económico y social cuyo precio va a tener que pagar ahora y mucho tiempo después de que el tirano se retire. Sin embargo los venezolanos siguen votando por él.
En Ecuador está Rafael Correa, un pendenciero que hace lo que quiere con las leyes y con el país. Acaba de ser reelegido.
En Brasil los numerosos escándalos de corrupción no mellan la popularidad de Lula, por lo que podemos concluir que en realidad no son escándalos, son solo corrupción.
En Paraguay el “obispo” Lugo tiene más mujeres que un sultán y más descendencia que Matusalén y dado el ambiente moral que existe en Latinoamérica, no debemos extrañarnos si su pueblo lo declara santo.
Al matrimonio Kirchner en Argentina la faltan brazos para quitarles el dinero a los argentinos. Las retenciones al campo, las jubilaciones, aerolíneas argentinas, etc.
Bolivia es el mundo del revés. Evo Morales, el bloqueador histórico, critica los bloqueos; los terroristas del gobierno causan terror ¡para luchar contra el terrorismo!; encapuchados del gobierno secuestran a ciudadanos a cualquier hora del día o de la noche sin ninguna orden de arresto ¡para defender los derechos humanos!; el que anda con un palo en la mano es demócrata y el que marcha pacíficamente es subversivo; las leyes valen solo cuando le conviene el gobernante y la corrupción está en cada rincón. Y sin embargo Evo sigue popular y probablemente será reelegido en diciembre.
Lo triste de este panorama es que refleja los valores éticos de nuestros pueblos (o su ausencia). El problema no es que haya personas como Bush, Ortega, Chávez o Morales, por que los hay en todas partes; el problema es que los elijamos como nuestros representantes y luego, conociéndolos, los reelijamos. Ellos son un reflejo de lo que somos y de lo que nos falta.
La Paz, 07/05/09

2 comentarios:

Don Juan de Sarco dijo...

La campaña del MAS se parece a la de Bush, campaña del miedo para justificar sus atropellos camino al poder.

Es una verdadera pena que los líderes no sean lideres y no posean el más mínimo de honestidad, principios y ética.

Saludos

CUCHITA dijo...

Si te fijas evo siempre se convierte en lo que mas critica.
Pero ojala criticara buenas cosasss