Javier
Paz García
El
libro La Fatal Ignorancia de Axel Kaiser tiene una tesis sencilla: Las ideas
importan y la estructura política y económica de una sociedad depende la las
ideas predominantes en dicha sociedad. El concepto no es novedoso; ya lo
postuló Antonio Gramci, John Maynard Keynes y F.A. Hayek por citar algunos. Por
ejemplo Keynes afirmó que “las ideas de los economistas y filósofos políticos,
tanto si son correctas como si son erróneas, son más poderosas de lo que comúnmente
se cree. De hecho, el mundo no se maneja por mucho más que eso. Hombres
prácticos que creen estar exentos de cualquier influencia intelectual, son
generalmente esclavos de algún difunto economista”.
Kaiser
aplica esta tesis a la situación de Chile y muestra cómo las ideas que
permitieron el milagro económico chileno han sido reemplazadas paulatinamente
por otras que frenan el desarrollo, limitan la libertad y generan mayor
pobreza. Kaiser atribuye esta tendencia al trabajo arduo y constante de los
impulsores del colectivismo y el estatismo en el ámbito de las ideas,
publicando libros y panfletos, dominando las universidades, creando centros de
pensamiento, permeando la cultura y de esta manera haciendo que sus ideas pasen
a formar parte de los valores de la sociedad. Y por supuesto a la dejadez de
quienes, beneficiándose de las ideas de la libertad, han creado empresas
exitosas, han generado trabajo, han ganado dinero y no han hecho nada para
defender y difundir tales ideas; a quienes, pensando que las ideas no importan
y que con hacer plata es suficiente, han abandonado el ámbito de la cultura y
lo han dejado en manos de los enemigos de la libertad. Esta es, según Kaiser,
la fatal ignorancia.
A
causa del retroceso de las ideas de la libertad, Chile está de cierta manera
desandando un camino exitoso y está aplicando políticas que han fracaso en
países vecinos y en el mismo Chile de otras épocas. El libro es un llamado para
retomar el debate y para que quienes creen en las ideas de la libertad, especialmente
los empresarios exitosos, financien la creación de think tanks y empiecen a
hacer desde la otra vereda, lo que ONGs y entidades de tendencia socialista han
venido haciendo por décadas.
Creo
que el diagnóstico de Kaiser, aunque aplicado a Chile, no varía mucho para
países como Bolivia, Venezuela, Argentina o Ecuador, aunque en estos casos la
situación es más desoladora.
Santa Cruz de la Sierra, 07/06/15
http://javierpaz01.blogspot.com/
No hay comentarios.:
Publicar un comentario