Javier Paz García
Santa Cruz representa progreso, democracia, estado de derecho, producción, libertad, igualdad de oportunidades. Esa es la batalla que Santa Cruz viene librando desde el movimiento igualitario de Andrés Ibáñez a finales del siglo XIX hasta nuestros días. Y en la Bolivia actual, Santa Cruz representa la vanguardia en estos valores.
Nuestra convicción en los valores democráticos nos permitió resistir los embates totalitarios del Movimiento al Socialismo. Y no me quepa duda que lo peor ha pasado. Hoy el MAS es menos: sin plan de gobierno, sin gestión económica, sin el poder total, político, económico y cultural que García Linera pretendía capturar, con un proyecto de constitución que no sirve y no tiene posibilidades de ganar un referéndum, con un proceso autonómico imparable, al que ellos se oponen y que representa el verdadero cambio en Bolivia.
El MAS usó el odio y el racismo como estrategia política y fracasó. Evo tomó y mejoró las recetas de su antecesor Carlos Mesa, exacerbando las diferencias entre bolivianos, continuando con la desinstitucionalización del Estado, haciéndose la burla de las leyes y el estado de derecho y acabó destruyendo al Estado y pisoteando la democracia (porque nadie me puede decir que en Bolivia hay Estado o democracia). La amenaza, la agresión, la intolerancia y el irrespeto a los valores democráticos fueron y son la insignia del Movimiento al Socialismo.
Santa Cruz no debe ir por ese camino. Santa Cruz debe ser fiel a los valores democráticos que le permitieron resistir el embate totalitario del MAS. Santa Cruz debe ser tierra de tolerancia, de respeto a la libertad de expresión, de respeto del derecho al disenso, de respeto a la libertad de tránsito. Sobre los hombros de Santa Cruz descansa el futuro de Bolivia, lo cual no es poca responsabilidad.
El MAS ha actuado de forma cobarde, Santa Cruz no lo debe hacer. Nuestro grito hace mucho tiempo viene siendo “democracia y libertad”. Seamos fieles a ese grito. Si alguien se para en la plaza 24 de septiembre y empieza a defender al MAS, respetemos su derecho a la libertad de expresión, silbemos si queremos, pero no le agredamos, hacerlo significaría volvernos iguales a los masistas, y negar lo que estamos defendiendo, la democracia y la libertad. Si algunos quieren hacer una concentración pacífica en apoyo a Evo Morales, pues no le conculquemos ese derecho. No nos convirtamos en lo que estamos oponiéndonos.
Siendo fieles a nuestros principios es que vamos a demostrar que estamos en lo correcto.
El MAS con lo que hizo en el Congreso, apuesta a que las regiones se radicalicen y le den la razón. ¡Por favor, no le demos la razón! No caigamos en los extremos, ni en los abusos, no le peguemos a alguien por pensar diferente, cuando precisamente nosotros estamos luchando por nuestro derecho a pensar diferente.
Esto de ninguna manera significa ser tímidos ante aquéllos que nos quieran amedrentar, ante aquellos que nos quieran trancar carreteras y quemar ánforas, a esos violentos hay que responderles con palo, fuerza y contundencia. Pero no le demos palo a aquéllos que no nos han ofrecido palo.
Es momento de ser inteligente.
La Paz, 29/02/08
El Deber, 04/03/08
viernes, 29 de febrero de 2008
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3 comentarios:
No agredir a los que piensan diferente, pero no porque ésto de equipare al MAS, sino que es el único camino a seguir, el único digno, justo y honorable.
Saludos
Completa y absolutamente de acuerdo contigo. Saludos
Cabe,
Me parece muy bueno tu articulo. Pero no solo son "Errores que Santa Cruz no debe cometer" si no "Errores que los Bolivianos no debemos cometer".
Cuidate
Un Abrazo
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